Ventajas de comprar un departamento con alguien más

Ventajas de comprar un departamento con alguien más

Cuando se toma la decisión de alquilar un departamento o casa con un amigo significa ahorrar dinero; además, te permite disfrutar de su compañía. En la actualidad, es muy común que los amigos alquilen un lugar juntos después de haber terminado la universidad; mayormente, se trata de un arreglo a corto plazo hasta que uno de los dos se casa o tiene la capacidad de comprar su casa.

Si el matrimonio no está en sus planes a futuro y la situación del compañero de casa funciona, pueden considerar comprar un departamento con el amigo. Hay personas que nunca celebrarían un contrato hipotecario con otra persona que no sea su pareja, pues, comprar con un amigo puede ser una inversión inteligente, siempre y cuando se conozcan los riesgos a los que se exponen.

Hay quienes buscan convencer a su compañero de comprar una casa, esta idea puede tener importantes beneficios en el aspecto financiero.

Cualquier persona que haya adquirido una casa conoce el desafío de obtener un préstamo hipotecario. Las entidades financieras han ajustado sus estándares con respecto a puntajes de crédito, deuda existente y pagos iniciales. En caso de llegar a solicitar un préstamo hipotecario, el prestamista requerirá un puntaje crediticio mínimo y un pago inicial. Por esta razón, muchos se han dado cuenta que es extremadamente difícil de calificar para una hipoteca por su propia cuenta. Sin embargo, cuando dos personas firman la solicitud de la hipoteca, aumentan las posibilidades de aprobación del crédito.

El propietario tiene la responsabilidad de pagar los servicios públicos, el mantenimiento y reparaciones, además de pagar la hipoteca. Los gastos adicionales de la propiedad atemorizan a algunas personas. En cambio, los amigos que compran juntos comparten estos gastos, reduciendo a la mitad la carga financiera. Por otro lado, compartir los gastos mejorará tus finanzas personales al darle la oportunidad de crear su cuenta de ahorros o pagar sus deudas.

A más tiempo de que tu amigo y tú vivan juntos y paguen la hipoteca, más equidad obtendrás. La equidad es la diferencia entre el valor de la casa y lo que se le debe a la entidad bancaria. En otras palabras, tu amigo y tú algún día se separarán y, a diferencia del alquiler, la propiedad de la casa les permitirá quedarse con dinero en efectivo en el bolsillo. Ambos pueden dividir los ingresos de la venta y poner el dinero en un pago inicial en sus propios lugares.

Cuando tienes una casa en lugar de alquilar, pagas intereses sobre la hipoteca, y ese interés es deducible en sus impuestos. Mientras más alto sea el ingreso, más beneficios obtendrás de esta deducción. En cambio, si compras una casa con un amigo, la cantidad de intereses que cada uno deduce debe sumar el total de intereses pagados sobre el préstamo ese año.

Convertir a los amigos en socios de una comunidad o una empresa cooperativa de vivienda tiene la ventaja de que el proyecto se fundamente en la confianza entre ellos. Desde el punto de vista financiero, aunar socios a una compra tan importante resultará muy beneficio, ya que, permitirá disponer de una mayor capacidad económica.

Recuerda, se trata de una sociedad, todos los socios son responsables de la deuda. Si se diera el caso de que uno de los dos no puede pagar su parte, debe existir un protocolo en los estatutos del proindiviso para saber cómo actuar de manera pactada. Sin embargo, eso no impedirá que los problemas de un socio arrastraran al resto y que todo pudiera acabar en una ejecución hipotecaria.

Te preguntarás, ¿Este sería el fin de la aventura de comprar una casa con un amigo? Pues, no necesariamente. Si la vivienda se hubiera depreciado durante esos meses, la ejecución podría no cubrir la deuda total y generar un embargo de bienes personales del compañero.

La idea de comprar una casa con amigo puede funcionar bien y ser beneficioso para ambos. Pero, no te apresures en tal decisión. Haz lo mismo que hacen los bancos: revisa el informe de crédito, los ingresos y los activos de cada uno para tener una mejor idea de la probabilidad de que un posible compañero de casa realice los pagos puntuales, así como su capacidad para realizar los pagos en caso llegue a perder temporalmente sus ingresos.

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